Cuando crecía en Corea, Kiup Kwon sabía que quería estudiar inglés en el extranjero. Eligió mudarse a Canadá y registrarse en la English Language Programme (Programa de idioma inglés, ELP) de la University of New Brunswick (UNB). Cuando llegó al ELP por primera vez, tenía previsto quedarse dos trimestres. Sin embargo, siete años más tarde está instalado en Fredericton y sintiéndose a gusto con el estilo de vida que ofrece esta pintoresca ciudad de la Costa Este.
Después de los primeros ocho meses en el ELP, prolongó su estancia un trimestre más. Durante este tercer trimestre, un administrador de ELP le animó a considerar quedarse en la UNB para sus estudios de grado. Kiup decidió realizar aquí su grado en Administración de Empresas (siglas BBA en inglés).
Kiup admite que sus dos primeros años de estudios fueron difíciles.
«El primer año, tomar cuatro o cinco asignaturas era muy difícil para mí. Sentía que no entendía nada», nos cuenta Kiup. «Los dos primeros años, estaba muy ocupado con mis estudios, no hablaba bien inglés, incluso pensaba que no podría encontrar trabajo en Nuevo Brunswick», afirma.
Kiup dice que los profesores y compañeros de clase le fueron de gran ayuda.
«La clave es la comunicación. Cuando expliqué mi situación a mis compañeros de clase, les dije que el inglés no era mi primer idioma y les pregunté si podía pedir los apuntes prestados, y fueron muy amables. Nadie se negó nunca».
Después de terminar su segundo año en el programa de Administración de Empresas, encontró un anuncio de ELP para un trabajo de verano para estudiantes. Kiup se presentó y consiguió el trabajo. Nos cuenta que esta experiencia le cambió para mejor.
«Gané algo de experiencia y mucha confianza. Tenía que ser muy activo, hablar inglés delante de cientos de estudiantes y comunicarme con gente de todo el mundo; para mí fue muy positivo».
Cuando le preguntamos qué consejo le daría a un estudiante que pensara en entrar en un programa de Inglés como Segundo Idioma, como el ELP, Kiup dice que hay que trabajar duro y esforzarse.
«La comunicación es muy importante. Es fácil ponerse nervioso, pero, a medida que lo intentas, ganas confianza y tus habilidades mejoran con el tiempo», explica. «Además, hay que hacer amistades con gente angloparlante para practicar».
Kiup recuerda lo mucho que le costaba todo al principio.
«Recuerdo cuando llegué, me costaba mucho pedir un café en Tim Horton’s. Me ponía nervioso y pensaba una y otra vez en lo que tenía que decir y cómo decirlo, pero ya no tengo que pensarlo».
Lo mejor de esta experiencia han sido las grandes amistades que encontró a través del ELP.
«Lo mejor sobre la experiencia de ELP, para mí, fue la oportunidad de conocer gente y hacer amigos de todo el mundo».
«Todavía mantengo el contacto con algunos. El año pasado fui a Corea y mi madre y yo visitamos Japón, donde me encontré con una de las personas con las que estudié aquí [en la UNB] hace siete años.
Después de su cuarto año en Administración de Empresas, Kiup decidió quedarse en Fredericton más tiempo. Participó en el programa cooperativo a través de la Facultad de Negocios y trabajó durante dos trimestres en el departamento de servicios financieros de la universidad. Después de graduarse, continúa trabajando en servicios financieros.
«Creo que me quedaré aquí [en Fredericton]. Me gusta el ambiente de trabajo, y la gente es muy, muy amable, también me gusta el ritmo de Fredericton».
